Morelia (México).- Al menos dos soldados murieron y 13 más resultaron heridos, tres de ellos de gravedad, tras la explosión de una mina terrestre colocada en una zona rural en los límites de los estados de Michoacán y Jalisco, oeste del país.
Una fuente de la XXI Zona Militar -con sede en la ciudad de Morelia, capital de Michoacán-, informó este lunes a EFE que el artefacto explosivo es de fabricación casera y detonó al paso de un convoy del Ejército mexicano en un camino de terracería del poblado denominado como Los Gallineros, en el municipio de Cotija, en Michoacán.
La onda expansiva provocó la muerte inmediata de un soldado, mientras que otro murió cuando era trasladado a un hospital regional al sufrir la amputación de extremidades inferiores.
La explosión también ocasionó heridas a otros 13 agentes del Ejército, de ellos tres permanecen hospitalizados con estados de salud catalogados como graves.
Las minas terrestres, de fabricación artesanal o casera, son un arma que en los últimos cuatro años han utilizado bandas de narcotraficantes en diversas regiones de Michoacán.
En esta franja limítrofe de Michoacán y Jalisco, autoridades han identificado una cruenta lucha entre las organizaciones criminales autodenominadas como Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), Los Pájaros Sierra (escisión de la primera) y el Cartel de Los Reyes, éste último asentado en el municipio michoacano de Los Reyes.
Apenas el pasado 3 de diciembre, diputados del Congreso del Estado designaron como alcaldesa de Cotija a Blanca María Ibarra Ochoa, en sustitución de Juan Pablo Aguilar Barragán, quien se separó de forma definitiva del cargo, por presuntas amenazas de muerte.
Previamente, el 3 de junio, sicarios asesinaron en el centro de Cotija a la alcaldesa Yolanda Sánchez Figueroa -del derechista Partido Acción Nacional (PAN)-, mientras el 28 de octubre fue asesinado a balazos Aurelio Santos Contreras, quien fue alcalde en el trienio 2018-2021, por el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), el mismo de la presidenta Claudia Sheinbaum.
La explosión también ocasionó heridas a otros 13 agentes del Ejército, de ellos tres permanecen hospitalizados con estados de salud catalogados como graves.
Morelia (México).- Al menos dos soldados murieron y 13 más resultaron heridos, tres de ellos de gravedad, tras la explosión de una mina terrestre colocada en una zona rural en los límites de los estados de Michoacán y Jalisco, oeste del país.
Una fuente de la XXI Zona Militar -con sede en la ciudad de Morelia, capital de Michoacán-, informó este lunes a EFE que el artefacto explosivo es de fabricación casera y detonó al paso de un convoy del Ejército mexicano en un camino de terracería del poblado denominado como Los Gallineros, en el municipio de Cotija, en Michoacán.
La onda expansiva provocó la muerte inmediata de un soldado, mientras que otro murió cuando era trasladado a un hospital regional al sufrir la amputación de extremidades inferiores.
Las minas terrestres, de fabricación artesanal o casera, son un arma que en los últimos cuatro años han utilizado bandas de narcotraficantes en diversas regiones de Michoacán.
En esta franja limítrofe de Michoacán y Jalisco, autoridades han identificado una cruenta lucha entre las organizaciones criminales autodenominadas como Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), Los Pájaros Sierra (escisión de la primera) y el Cartel de Los Reyes, éste último asentado en el municipio michoacano de Los Reyes.
Apenas el pasado 3 de diciembre, diputados del Congreso del Estado designaron como alcaldesa de Cotija a Blanca María Ibarra Ochoa, en sustitución de Juan Pablo Aguilar Barragán, quien se separó de forma definitiva del cargo, por presuntas amenazas de muerte.
Previamente, el 3 de junio, sicarios asesinaron en el centro de Cotija a la alcaldesa Yolanda Sánchez Figueroa -del derechista Partido Acción Nacional (PAN)-, mientras el 28 de octubre fue asesinado a balazos Aurelio Santos Contreras, quien fue alcalde en el trienio 2018-2021, por el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), el mismo de la presidenta Claudia Sheinbaum.
Mundo – El Nacional